¡El Arte está en todo! Preconizado por los artistas seguidores del nuevo arte en el cambio del siglo pasado, este eslogan ilustra su voluntad de conseguir crear objetos, elementos decorativos, arquitecturas que combinen funcionalidad y estética. El arquitecto del Art Nouveau modela el espacio interior con la luz de vidrieras y adapta su decoración para responder a las necesidades de la vida moderna. Sus motivos se inspiran en la naturaleza (insectos, flores, etc.) desarrollando una estética del arabesco. Entre 1890 y 1910, Inglaterra, Francia, Bélgica y un poco después, Estados Unidos, adoptan este estilo que hace tabla rasa del eclecticismo del Segundo Imperio.
Los espacios de exposición del Palais Lumière en Évian permiten ofrecerle al visitante la reconstitución completa de los emblemáticos comedores de Gustave Serrurier-Bovy y de Henry Bellery-Desfontaines acompañada de su decoración pintada por Henri Martin.